¿Cuál es la diferencia entre un 4x4, un SUV y un crossover?

El nombre «4x4» hace referencia a sus cuatro ruedas motrices. Este atributo lo convierte en un vehículo que se adapta de forma natural a la conducción en terrenos difíciles o accidentados. Asimismo, los 4x4 también disponen de una carrocería potente, robusta y resistente que les permite acomodarse a cualquier entorno.

Entre otras particularidades, los 4x4 suelen tener tracción selectiva, por lo que elegir qué eje es accionado por el motor (delantero, trasero o ambos) es posible. Este tipo de vehículos también incorpora un bloqueo de diferencial que posibilita girar las ruedas a diferentes velocidades. En el caso de los conductores experimentados, estas funcionalidades serán especialmente útiles a la hora de habituarse a cualquier situación al conducir en superficies irregulares.

¿Qué significa SUV? SUV son las siglas de Sport Utility Vehicle, lo que se traduciría como «Vehículo Utilitario Deportivo» en español. Lo que caracteriza a un SUV es la elevada distancia respecto al suelo y el considerable tamaño. El espacio interior, por su parte, lo convierte en un vehículo familiar óptimo, en consonancia con los monovolúmenes. No obstante, el SUV, a diferencia del 4x4, no siempre posee tracción en las cuatro ruedas.

Aunque el SUV, por definición, es un coche con estética de todoterreno concebido para el asfalto, también sigue siendo una opción adecuada para transitar por caminos relativamente accidentados —como pistas forestales—, aunque no se recomienda circular con él campo a través. Siempre podrá decantarse por un SUV si lo que desea es combinar unas buenas prestaciones de conducción con un alto nivel de confort, tanto en la parte delantera del vehículo como en la trasera. La altura de un SUV también es uno de sus puntos fuertes, ya que ofrece una mejor visibilidad y una sensación de seguridad durante la conducción. Consultar una comparativa de SUV le ayudará a encontrar el modelo con las características y opciones que mejor se adapten a sus necesidades: tracción en las cuatro ruedas, tecnologías de asistencia al conductor, maletero espacioso... con tantas características resultará fácil elegir.

Si se considera un conductor urbano, el SUV híbrido también conforma una excelente opción, con una autonomía que ofrece tantas posibilidades como el SUV con motor de combustión.

Aunque los crossovers y los SUV se confunden a menudo, en realidad, existen varios elementos que los diferencian. El crossover es un cruce entre un 4x4 y una berlina, de ahí su nombre. En concreto, la plataforma de un crossover es menos voluminosa que la de un SUV, pero el chasis de ambos vehículos es más alto. Los crossovers aglutinan, por tanto, numerosas ventajas de los SUV: mayor visibilidad, confort interior y sensación de seguridad. Sin embargo, el hecho de poseer un habitáculo interior más reducido limita el espacio para los pasajeros y el maletero, pero infinidad de modelos siguen teniendo 5 plazas y un maletero de gran volumen. Por otra parte, aunque no están diseñados para transitar por terrenos irregulares, en cierta medida los crossovers son capaces de adaptarse a caminos difíciles, sobre todo si hablamos de modelos con tracción total.

Perfecto para la conducción en ciudad, el crossover destaca por ofrecer un rendimiento superior en términos de velocidad y manejo gracias a su peso más ligero. El crossover será, en consecuencia, la mejor opción si está buscando un vehículo de marcado carácter deportivo. Y no olvide que para satisfacer las demandas de los usuarios, existen distintas opciones de motor. Por ello, se pueden encontrar crossovers con motor de combustión, pero también híbridos e incluso eléctricos.