¿Por qué comprobar la geometría de tu coche?

La geometría de un coche consiste en ajustar las ruedas para que queden paralelas entre sí, pero también perpendiculares al suelo. Cada vehículo tiene unas recomendaciones específicas para ajustar su geometría. Estas instrucciones vienen dadas por el fabricante, que ha estudiado todas las características del tren de rodaje con el fin de definir los ajustes más beneficiosos para el vehículo.

Durante la comprobación de la geometría de tu automóvil, el mecánico ajustará la alineación de las ruedas. Unos neumáticos que han dejado de estar paralelos pueden hacer que la conducción sea peligrosa y provocar un desgaste anormal en el caucho. Para esta operación, que dura menos de una hora, el técnico utiliza un banco de geometría. Se trata de un dispositivo profesional que verifica los ángulos geométricos de las ruedas. Con una comprobación rápida de los ángulos es posible emitir un diagnóstico preciso y completo del estado de la geometría.

El paralelismo es un componente de la geometría que nos informa de que hay exactamente la misma distancia entre la parte delantera y trasera de ambas ruedas.

Los otros componentes de la geometría de un automóvil son los ángulos de caída y los ángulos de avance. Los primeros hacen referencia a la inclinación de las ruedas respecto de la carretera, vistas de frente. Los segundos nos hablan de la inclinación del eje de las rótulas, vistas de perfil. En la verificación de la geometría, estos ángulos se comprueban escrupulosamente y se rectifican si es necesario.

A esto se suma el equilibrado de los neumáticos, que consiste en comprobar el peso de cada rueda del mismo eje. Cuando hay un desequilibrio, se notarán vibraciones a partir de cierta velocidad, lo que hace peligrosa la conducción. Gracias a los contrapesos colocados en las llantas, el peso se reparte de manera uniforme.

Cuando conduces, hay varios factores que pueden alterar la geometría de tu vehículo:

· Toparte con un bordillo;

· conducir de manera habitual por carreteras en malas condiciones;

· pasar por baches con frecuencia.

El desgaste de ciertas partes del tren de rodaje también puede afectar la geometría del automóvil. Todos estos factores alteran la alineación de las ruedas y tienen consecuencias negativas para tu seguridad, pero también para el consumo de combustible.

Ajustar la geometría del coche permite corregir estos desajustes. Los beneficios de la geometría son numerosos:

• Optimiza el agarre del vehículo y reduce la resistencia a la rodadura, especialmente en las curvas;
• reduce el consumo de combustible y, por lo tanto, las emisiones de dióxido de carbono;
• prolonga la vida útil de los neumáticos;
• ralentiza el desgaste de ciertas partes mecánicas (horquillas de suspensión, rótula de dirección, etc.).

Durante una revisión de Peugeot o un cambio de neumáticos, el técnico a cargo del mantenimiento de tu vehículo puede detectar que los neumáticos están desgastándose de manera irregular. Esta es una de las muchas señales que indican que se necesita ajustar la geometría del tren de rodaje.

No obstante, puedes detectar la necesidad de ajustar la geometría del automóvil tú mismo si ves que:

•  Los neumáticos se desgastan rápidamente y de manera diferente entre sí;
• al conducir, el automóvil tiende a querer ir a la derecha o a la izquierda sin ningún motivo;
• cuando alineas las ruedas, el volante queda girado hacia la derecha o hacia la izquierda;
• te cuesta enderezar las ruedas al salir de una curva.

Cuando se detecta demasiado tarde el desgaste anormal de los neumáticos, no te quedará más remedio que añadir al precio del reglaje de la geometría el coste de unas cubiertas nuevas. Gracias al mantenimiento regular de tu coche, podrás detectar ciertos problemas y así evitar costes innecesarios.